En el fondo hay cosas que nunca llegarás a decir por miedo. En realidad todos somos un poco cobardes cuando se trata de decir algo que nos importa demasiado.Que las cosas que importan de verdad,son las que se dicen con una mirada, un gesto, una sonrisa... Hasta hay veces que sin tener lo que quieres, te da miedo perderlo.Pero no vale la pena forzar las cosas, todo ocurre cuando menos te lo esperas, como por arte de magia, para bien o para mal, te das cuenta de que nada depende de tí, que también depende de otros, eso hace que la vida sea tan curiosa.Que las cosas no tienen valor por sí solas, serán importantes en la medida que tú les des importancia.

Las cosas llegan solas, sin saber por qué y cuando menos te lo esperas. Las cosas pasan porque sí, porque nos hacen ser más nosotros mismos. Cada experiencia, cada cosa buena o mala que te pase en la vida te marcará y te ayudará a crecer. Pero al mismo tiempo uno aprende a ver lo que es la vida: un camino en el que te dan dos de cal y una de arena...un minuto de felicidad y 59 de lucha incansable contra todo lo que se te echará encima. Por eso, como la vida es un camino difícil, mejor buscarle un lado positivo.Abre los ojos y mira todo lo que tienes ante ti.Si eres honesto con lo que quieres en tu vida, la vida te lo acabará dando.